jueves, 15 de agosto de 2013

Colegio Nacional La Plata S Mill



Stuart Mill Sobre la libertad. Trabajo Práctico.

 Organización del trabajo en clase:
 Formar grupos de cuatro personas, discutir los temas y realizar  un breve resumen de cada ítem.-

Consignas
1-Leer el texto y ubicar el contexto de referencia, relacionando los indicadores de otros períodos históricos.
2-analice el concepto de libertad y explique su contenido con nociones análogas conocidas en otras disciplinas y/o experiencias personales.
3-Compare este concepto con el contenido del Trabajo Enajenado de C. Marx: el trabajo como realización del género humano y la pérdida de esta capacidad por la intervención del mercado y la apropiación privada.


  Fragmento de Stuart Mill Sobre La libertad
  " No se puede llamar libre a una sociedad, cualquiera que sea la forma de su gobierno, si estas libertades no son respetadas por él a todo evento; y ninguna será completamente libre, si estas libertades no existen en ella de una manera absoluta y sin reserva.
  La única libertad que merece este nombre es la de buscar nuestro propio bien a nuestra propia manera, en tanto que no intentemos privar de sus bienes a otros, o frenar sus esfuerzos para obtenerla. Cada cual es el mejor guardián de su propia salud, sea física, mental o espiritual. La especie humana ganará más en dejar a cada uno que viva como le guste más, que en obligarle a vivir como guste al resto de sus semejantes.
Aunque esta doctrina no sea en absoluto nueva y pueda tener, para algunas
personas, aspecto de perogrullada, no existe ninguna otra que se oponga más directamente a la tendencia general de la opinión y de la costumbre existentes.
  La sociedad se ha preocupado tanto, con arreglo a sus luces, de tratar de

obligar a los hombres a seguir sus nociones de perfección personal, como en coaccionarles a seguir sus nociones de perfección social. Las repúblicas de la antigüedad se creían con derecho (y los filósofos apoyaban su pretensión) de reglamentar toda la conducta humana por medio de la autoridad pública, con el pretexto de que la disciplina física y moral de cada ciudadano es de un profundo interés para el Estado. Esta manera de pensar podía ser admisible en las pequeñas repúblicas rodeadas de enemigos poderosos, en peligro constante de ser atacadas, o de ser sumidas en una conmoción interior".-